TEXTO: JUAN FRYBORT IMÁGENES: ISTOCK
Las recetas de la abuela viajan hasta El Salvador
Laura Robles, una estudiante de 17 años, decidió que todo joven debería saber hacer lentejas. Y eso le empujó a recopilar las recetas de su abuela. Lo que no sabía cuando empezó este trabajo para el colegio es que se iba a convertir en un libro con el que ya ha recaudado más de 4.000 euros que ha donado para un proyecto de Manos Unidas en El Salvador. Croquetas, patatas guisadas, potaje, una rica carrillada o exquisitos postres, todos los secretos de la cocina tradicional se esconden en las páginas del libro La cocina no escrita de mi abuela. Recetas que se han ido transmitiendo en su familia de generación en generación, a las que Laura ha añadido un toque de creatividad y un lenguaje actual, para que lo puedan entender los nativos digitales. Laura cree que el problema de muchos jóvenes a la hora de afrontar una receta es que no entienden el lenguaje que se usa de la cocina. Por eso ha creado un glosario que explica, por ejemplo, qué es cortar en juliana o macerar un alimento. En total 60 recetas que no solo tienen el mérito de incorporar a los jóvenes a los placeres de la cocina sino que han permitido la compra de material escolar y sanitario para niños de familias necesitadas del colegio de Laura y que van a permitir que en El Salvador algunos niños reciban también los beneficios de las recetas de la abuela. https://www.facebook. com/RoblesRestaurantes
Quioscos inclusivos
Con la entrada del año 2020 la ciudad de Barcelona se ha hecho más inclusiva. Desde el mes de febrero, dos quioscos gestionados por personas con discapacidad combinarán la venta de prensa y revistas con la venta de productos sostenibles y solidarios elaborados por entidades sociales y por personas con necesidades especiales.
Aparte de su carácter inclusivo, esta iniciativa de la cooperativa Diverscoop quiere lograr que estos establecimientos se conviertan en un punto de referencia y dinamización del vecindario. La idea es vender productos vinculados al barrio y ofrecer servicios de recogida de paquetería. Pero sin olvidarse de los problemas de los vecinos. El primer paso que se va a dar en este sentido es apoyar a las personas que se sienten solas. Estos quioscos repartirán prensa a las personas que vivan en la zona y que formen parte del proyecto Vincles, una iniciativa del Ayuntamiento de Barcelona para ayudar a las personas mayores a combatir la soledad no deseada por medio de las nuevas tecnologías.
La previsión es que la cooperativa Diverscoop gestione siete quioscos antes de que termine el año 2020.
#diverscoop

Impuestos solidarios
Al adquirir un alimento, pagamos siempre un impuesto. Cuando nuestra compra va a ser donada, por ejemplo en una recogida de alimentos, la cosa no cambia; el impuesto correspondiente se paga igual. En España, Santiago López, portavoz de la Asociación Nacional de Alimentos Solidarios, considera que el impuesto, en este caso el IVA, que soportamos en la adquisición de alimentos para ser donados, debería ser destinado a sumar en la donación. Si esta iniciativa fuera ya una realidad, estimando un tipo medio del IVA de los alimentos del 7,5%, con el importe del IVA de los más de 21 millones de kilos de la gran recogida 2018, se hubieran podido donar 1.6 millones de kilos más.
Esta asociación ha conseguido reunirse en el Congreso de los Diputados con varios grupos parlamentarios que han acogido bien esta propuesta. Actualmente están realizando una petición de firmas a través de la plataforma change.org, dirigida al Ministerio de Hacienda y Función Pública, para que su iniciativa cobre importancia y llegue al Congreso de los Diputados. El objetivo es llegar a las 150.000 firmas. @ANDASSOLIDARIO