Las fuertes lluvias registradas en Perú desde finales de enero han dejado tras de sí un terrible balance de víctimas mortales, desplazados y personas sin hogar e importantes daños en carreteras y suministros de servicios esenciales como el agua.
Piura, Trujillo, Huarmey y Chosica son algunas de las zonas de Perú más devastadas por el fenómeno «El Niño Costero». Fundación MAPFRE ha coordinado y financiado el envío de cuatro plantas potabilizadoras que han sido instaladas por los seis bomberos voluntarios españoles pertenecientes al Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga que se han desplazado a la zona de la catástrofe.
Actualmente las plantas proporcionan agua potable a 16.000 personas al día. Perú sigue necesitando ayuda.
En Perú, más de 200 voluntarios de MAPFRE colaboraron en la elaboración y reparto de las bolsas de alimentos y medicinas para los damnificados