Los Premios Fundación MAPFRE a la Innovación Social son una oportunidad para descubrir proyectos capaces de transformar el mundo en relación con la salud digital, la movilidad y la propia industria aseguradora. La innovación social es clave para
acelerar la solución a los problemas del siglo XXI.

TEXTO: ANTONIO HUERTAS, presidente de Fundación MAPFRE

 

Si tienes un proyecto innovador, una idea que crees que puede revolucionar el mundo y ayudar a la sociedad a superar sus dificultades, esta es tu oportunidad. Fundación MAPFRE te quiere ayudar a desarrollar tu proyecto y convertirlo en realidad. Buscamos iniciativas que puedan transformar tres aspectos esenciales para la sociedad, como la salud, la movilidad y la seguridad vial y el seguro.

Vivimos en un mundo muy cambiante cuya transformación está siendo espoleada por la digitalización, que exige unas capacidades económicas y tecnológicas que no están al alcance de todas las regiones del mundo, ni siquiera de todas las personas que viven en una misma región. La brecha digital está acelerando las diferencias y desde Fundación MAPFRE, preocupada siempre por los colectivos más desfavorecidos, queremos contribuir a impulsar nuevas soluciones sociales que den respuesta a las crecientes necesidades que la digitalización está generando y, sin duda, también a los problemas que se están originando por ese aumento de la desigualdad. Esta es la razón por la que los Premios Fundación MAPFRE a la Innovación Social son una prioridad en la agenda de instituciones como la nuestra.

Esta primera edición, que impulsamos con un magnífico compañero de viaje como es IE Business School, busca conocer tendencias de cambio, abrir nuevos mercados, físicos y digitales, y contribuir al desarrollo de ecosistemas de innovación social donde estén conectados todos los stakeholders, que son claves en la resolución de los problemas de la sociedad.

Durante los próximos meses, la Fundación se va a dirigir a los principales centros y laboratorios de innovación social para presentarles los Premios y promover candidaturas potentes para cada una de las categorías. Buscamos ideas, enfoques, dinámicas y modelos disruptivos, que sean susceptibles de transformarse en soluciones útiles para mejorar la movilidad y la seguridad vial (mobility), la salud (e-health) y el seguro (insurtech).

En el campo de la salud, por ejemplo, las reglas de juego están cambiando y los desafíos son inimaginables. Vamos hacia una medicina conectada mediante la cual el domicilio se convertirá en el hospital más habitual para muchas patologías. Para los entornos urbanos, se ganará eficacia gestionando las cuestiones básicas relacionadas con la salud, por ejemplo, mediante videoconsultas. Pero ese desarrollo urbano abre también la puerta a una medicina de alta calidad a muchas zonas remotas del planeta que no pueden permitirse el acceso a una medicina tradicional. La movilidad que hoy conocemos también va a cambiar, ya está cambiando. Necesitamos diseñar, entender y adaptarnos a un nuevo entorno conectado donde los vehículos ganarán protagonismo pero seguirán transportando personas que, a su vez, seguirán siendo también peatones o ciclistas. Toda esa realidad hay que organizarla y gestionarla para que pueda adaptarse a la sociedad, y no al revés, siempre que sea posible.

«Vivimos en un mundo muy cambiante cuya transformación está siendo espoleada por la digitalización, que exige unas capacidades económicas y tecnológicas que no están al alcance de todas las regiones del mundo»

En las regiones más desiguales del planeta, el reto es mayor. Para cerrar estas brechas de inequidad, necesitamos no sólo más y mejores soluciones sino, sobre todo, que sean nuevas y diferentes. Ya hay países en Latinoamérica que están implantando metodologías novedosas de educación financiera, como herramientas que superan al microcrédito y que permiten a una pequeña organización local obtener fondos de la comunidad que luego se distribuyen dentro del mismo grupo en forma de crédito, ahorro e inversión para financiar sus necesidades.

Con la edición de estos premios ponemos en marcha un Got Talent de la innovación con el que contribuir a desarrollar productos y servicios que respondan a las necesidades de la sociedad, que sean sostenibles en el tiempo y que tengan el potencial de transformar la cultura de una comunidad e incluso una ciudad completa. Buscamos GameChangers, personas con iniciativas y sensibilidad social que trasmitan pasión, ambición y compromiso y que estén desarrollando proyectos y estrategias encaminadas a transformar su entorno, construir una sociedad mejor e impactar positivamente en el mundo. Hoy todos estamos llamados a ser agentes del cambio y contribuir a la transformación de nuestra sociedad.

¡Únete al reto!

#scalingyourimpact

Un mundo lleno de ideas brillantes

Londres, São Paulo, Medellín, Berlín y Ciudad de México son algunas de las ciudades en las que se encuentran muchos de los centros de innovación social de referencia. Se trata de espacios dedicados al emprendimiento, lugares abiertos donde se fomenta la participación y la integración, un aspecto clave para estar en contacto con clientes e inversores y poder poner en marcha propuestas, proyectos o startups con incidencia social, económica, urbana, cultural y política.

Una de las más destacadas es la fundación UNLTD, creada en Londres en el año 2000, que ofrece apoyo a más de 1.000 emprendedores sociales cada año a través de su red Global Social Entrepreneurship Network-GSEN con presencia en 9 países, incluido España, donde los innovadores tienen acceso a formación, asesoría y acceso a una amplia red de ejecutivos y filántropos interesados en apoyar proyectos de emprendimiento social. En la capital británica también son muy activas Nesta Impact Investments , UK National Advisory Board on Impact Investing, Social Enterprise UK y la página oficial del gobierno británico, donde se explica cómo crear una entidad de innovación social y cómo obtener financiación.

En Brasil, destacan dos centros de innovación situados en São Paulo. Son el Amani Institute, un centro de formación para innovadores potenciales, que permite realizar prácticas en países como India y participar en el programa Social Innovation Management, que permite compaginarlo con la actividad profesional. En la ciudad brasileña, destaca, además, el Impact Hub São Paulo, que ofrece un sinfín de conferencias y jornadas en abierto con emprendedores de primer nivel para compartir experiencias. En Colombia, llama la atención el crecimiento que está alcanzando la ciudad de Medellín a la hora de promover la innovación social. Destaca el centro de innovación social de la Agencia Nacional para la Superación de la Pobreza Extrema (ANSPE), que se encarga de apoyar, desde el ámbito técnico y financiero, proyectos cuyo objetivo sea brindar soluciones a los problemas de las poblaciones más pobres del país.

En Ciudad de México destaca el EGADE Business School, Tecnológico de Monterrey, que desarrolla programas de máster y de doctorado en materia de innovación social con el objetivo de desarrollar líderes emprendedores éticos. En colaboración con la Comunidad Internacional de Negocios, desarrolla pasantías en empresas, proyectos de consultoría e investigación aplicada a proyectos y servicios a emprendedores.

Desde 2005, también opera en España otro centro de innovación social, la fundación Ashoka, fundada en Estados Unidos en 1981, que trabaja con las empresas para que descubran su potencial de ser agentes de cambio a través de sus empleados y que promueve la actitud changemaker mediante la selección de innovadores que estén mejorando la vida de millones de personas.